La nueva economía digital, asociada a la digitalización de la producción y el comercio, se está convirtiendo en una fuerza económica representativa para la estructura productiva de los países, y ofrece inmensas oportunidades para los sectores económicos en términos de fortalecimiento de las interacciones con clientes y proveedores, mayor acceso a mercados, una enorme disponibilidad de
información para la toma de decisiones, mejoras en la productividad y nuevas posibilidades de innovación en productos, procesos y modelos de negocio. Así lo concibe el informe de Guillermo Cruz de ALAI. Descárgalo aquí